COMO SIEMPRE MAFALDA Y SUS AMIGOS NOS PONEN AL DÍA DE LAS PRIORIDADES
Julieta
Referencias de mi libro: Bilbao Expediente 406
domingo, 4 de mayo de 2014
jueves, 24 de abril de 2014
ARTICULO EN DEIA
Bilbao, escenario del crimen
LA BASAURITARRA AMAIA
MANZISIDOR PUBLICA SU PRIMERA NOVELA CON 68 AÑOS TRAS PASAR POR UN TALLER
LITERARIO EN LA CAPITAL VIZCAINA. SE TRATA DE UN THRILLER NEGRO QUE SE
DESARROLLA EN CONOCIDOS ESCENARIOS DE LA VILLA
UN REPORTAJE DE
JANIRE JOBAJURIA -
Martes, 22 de Abril de 2014 -
Cuando se
inscribió al cursillo de creación literaria que ofrecía el centro cívico del
barrio de San Francisco, en Bilbao, Amaia Manzisidor no sabía de lo que iba a
ser capaz. A esta natural de Basauri, aunque residente en la villa, siempre le
habían gustado las letras pero su vida había transcurrido por otros derroteros.
Estudió Ingeniería Técnica y empezó a trabajar con su padre en su taller de
fabricación de piezas industriales de Basauri. No fue hasta que tuvo a sus
hijos cuando a Amaia le dio por dedicarles poesías escritas durante las noches
en las que se desvelaba. Aún así, tras su paso por el mundo de la troquelería,
comenzó su larga andadura por la enseñanza en institutos de Basauri y Bilbao.
Sin
embargo, una enfermedad mermó su salud hasta verse encerrada en casa casi sin
poder moverse y ello le llevó a volver la vista a su afición de juventud.
Cuando empezó a recuperarse, al ver que aunque estaba mejor necesitaba mucho
tiempo de reposo, se interesó por el cursillo de Bilbao ya que la escritura
podía ser compatible con su nuevo estilo de vida.
Al taller
se enganchó "desde el primer día". "Las profesoras eran
magníficas y las alumnas éramos todas mujeres con muchas ganas de hacer
cosas", asegura. Sus primeras creaciones fueron textos que "se
alargaban hasta el infinito y no sabía como acotar", reconoce. Hasta que
un día, la profesora les invitó a escribir un relato policiaco. En él debería
incluir varios elementos característicos de este tipo de género negro como una
gabardina o un día de lluvia.
De este
reto surgió una inspectora: Julieta Laborda. Y un escenario del crimen: el
barrio de San Francisco, donde recibía las clases literarias. "Escribí el
relato y lo presenté en el aula. Yo ya me daba cuenta de que se me había
quedado corto, una apreciación que fue secundada por la profesora que me animó
a continuarlo", recuerda.
Un puzle de muchas piezas
Así, la
recién nacida comisaria fue ganándose toda una vida. Amaia conoció a sus
padres, un matrimonio bien avenido de jubilados que aún viven con ella y le
tratan de llevar por lo que ellos consideran el buen camino: menos maleantes y
más novios. Junto a Julieta vio la luz todo un elenco de personajes que le
acompañan a descubrir al asesino de un horroroso crimen, el de una joven, Karina Perodici, que aparece violada y torturada. La
investigación llevará a la inspectora, acompañada de su fiel compañero, Pepe
Dueñas, y el resto del equipo de Homicidios de la Ertzaintza, a recorrer
diversos parajes de Bizkaia, desde un destartalado almacén en Astrabudua a las
magníficas mansiones de Neguri en una mezcla de piezas que deberá encajar para
recomponer el puzle que originó la muerte de la chica.
La novela
se titula Bilbao, expediente 406 y fue publicada el año pasado y ya va por su
segunda edición aunque, como Amaia reconoce, se encuentra "perdida entre
los miles de libros" que descansan en las baldas de las librerías. Una
compañera del taller literario, que ya había publicado alguna cosa, fue la
ayuda que necesitó para que Ediciones Beta editara el manuscrito. La novela se
presentó en la feria del libro de Bilbao y coincidió con uno de los casos criminales que más ha conmocionado la villa, los asesinatos del falso monje shaolín, Juan Carlos Aguilar.
El encarcelado mató a dos mujeres, Jenny Sofía Rebollo, cuyo cadáver apareció
descuartizado, y Maureen Ada Otuya, que falleció tras varios días en coma
debido a la brutal paliza que recibió en el gimnasio que regentaba en una de
las calles que más aparece en la novela de Amaia: Máximo Agirre.
"Fue
todo casualidad, pero la gente me preguntaba si el libro estaba basado en esos
hechos. No podía ser porque escribir una novela cuesta tiempo y aquello acababa
de producirse", explica quien, a sus 68 años, ha visto cumplido un deseo
que no había llegado ni a formular.
miércoles, 26 de marzo de 2014
martes, 11 de marzo de 2014
sábado, 1 de marzo de 2014
M2U00011
Julieta, la comisaria de la Ertzaintza asistiendo a las clases de tango que le permiten relajarse de sus tensiones diarias con los profesores: Bakartxo y Joseba
a
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